2.47 ¿Por qué la Iglesia no se enfrentó a los nazis?
El Papa Pio XII ha sido frecuentemente criticado por supuestamente no oponerse a los Nazis durante la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, su predecesor Pio XI había ya hablado duramente contra el Nazismo. Durante la guerra, el Papa Pio XII, junto a muchos otros Católicos, se dedicaron a ayudar a miles de judíos y a otra gente perseguida. A muchos se le ofreció refugio en las edificaciones religiosas.
Por lo tanto, los Nazis consideraron al Papa como un enemigo. Las críticas sobre el comportamiento del Papa durante la Guerra no emergieron hasta los años 1960s, mientras que inmediatamente después de la Guerra el Papa Pio XII fue reconocido por el Congreso Judío Mundial y los rabinos de Roma, entre otras organizaciones.
Hitler dijo en cierta ocasión: “La Providencia me ha llamado a mí, un católico, para acabar con el catolicismo. Sólo un católico puede destruir el catolicismo”. Estaba seguro de contar con todos los medios para destruir por fin al catolicismo. Igualmente la gran corriente marxista estaba segura de realizar la revisión científica del mundo y de abrir las puertas al futuro: “¡La Iglesia está llegando a su fin, está acabada!” Pero la Iglesia es más fuerte, según las palabras de Cristo. Es la vida de Cristo la que vence en su Iglesia. [Papa Benedicto XVI, Encuentro con los Sacerdotes de Albano, 31 Agosto 2006]